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¿Qué son las pruebas de personalidad y para qué sirven?

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Un test de personalidad es una herramienta que se usa para identificar la personalidad de una persona. Estas pruebas hacen referencia  a métodos diseñados para medir los ítems característicos de los rasgos que exhiben las personas en diferentes situaciones. Las pruebas de personalidad se pueden usar para aclarar diagnósticos clínicos, guiar intervenciones terapéuticas y ayudar a definir como las personas pueden actuar ante diferentes situaciones, factor indispensable en los procesos de selección de personal. 

La personalidad es algo que está presente en nuestra vida cotidiana, en el momento que hablamos de nosotros mismos y de los demás nos estamos refiriendo a características propias del carácter y forma de ser de una persona, por consiguiente es la personalidad la que guía el actuar de la humanidad  en un entorno y lo hace tan importante en el momento de conocer a detalle la idoneidad de un candidato.

¿Qué es una prueba de personalidad?

Un test de personalidad es una herramienta comúnmente utilizada por las organizaciones para entender mejor la personalidad de un empleado, su carácter, su forma de pensar, etc. También es un excelente predictor en los procesos de reclutamiento y es muy útil para obtener información relevante para contratar a un candidato. Las pruebas de personalidad más adecuadas para los procesos de contratación son:

Además de medir la personalidad de cada candidato, estas pruebas buscan relacionar su forma de actuar en diferentes ambientes de trabajo que puedan presentarse y también proporcionan información sobre las habilidades interpersonales, de comunicación y cognitivas de una persona.

Tipos de pruebas de personalidad.

Hay dos tipos de pruebas de personalidad: los inventarios de autoinforme y las pruebas proyectivas.

Los inventarios de autoinforme implican que los evaluados lean las preguntas y luego califiquen hasta qué punto las preguntas o afirmaciones se aplican a ellos. Un ejemplo común de inventario de autoinforme es el Inventario de Personalidad completo.

Las pruebas proyectivas presentan a los evaluados ciertas escenas, ambientes de ejemplo o situaciones y les piden que den una interpretación de ellas para comprender cómo cada candidato actuaría.

La principal ventaja de los inventarios de autoinforme es la capacidad de estandarizar y utilizar normas establecidas. El autoinforme también es relativamente fácil de administrar y tiene mayor confiabilidad y validez que las pruebas proyectivas.

¿Cómo implementar los test de personalidad?

Como se mencionó anteriormente, las pruebas de personalidad miden factores como la motivación, los rasgos de temperamento, la estabilidad emocional, las habilidades sociales y más. Existen muchos tipos de pruebas, pero una de las más utilizadas en el mundo de los recursos humanos es el Personality Factor Survey, o test de personalidad 16 PF, creado en 1993 por el psicólogo británico Raymond Cattell.

Una vez que se ha seleccionado una prueba para su aplicación, se presenta al candidato en papel o a través de un dispositivo digital. La prueba incluye preguntas o afirmaciones que deben ser respondidas con opciones A, B o C. Por ejemplo, algunos de los ítems que puedes encontrar pueden ser:

  • A veces no me llevo bien con la gente porque mi forma de pensar es inapropiada e inusual.
  • Suelo irme a la cama satisfecho con mi día.
  • Cuando se trata de construir o hacer algo, prefiero trabajar.

Estas alternativas se responden con verdadero o falso u otras respuestas específicas como “casi nunca”, “a menudo”, “siempre”, etc. Una vez que se recopilan las respuestas, los resultados deben evaluarse y analizarse para determinar en qué dimensión general de la personalidad se encuentra el candidato. Los evaluadores incluso pueden puntuar las respuestas de forma automatizada. Luego, se debe calcular la puntuación de cada ítem para obtener el informe final de la prueba. Este análisis permite determinar si una persona es adecuada para un puesto específico y si es capaz de desempeñar las funciones del puesto.

En conclusión, conocer la personalidad de un candidato es esencial para optimizar las decisiones de selección de personal y no solo centrarse en aspectos académicos o profesionales. Estar inmerso en una organización implica más que eso, por lo que es indispensable conocer y utilizar este tipo de evaluaciones en los procesos de contratación.